Eduardo Mendoza
Seix Barral 2001
ISBN 9788432208157
«En aquella época me entretenía leer novelas policíacas. Acababa de leer una de Ross McDonald cuyo nombre no recuerdo, y tuve el capricho de seguir sus pasos a mi manera, más como un homenaje que como parodia. Así empecé y acabé, casi de un tirón, en el plazo de una semana, El misterio de la cripta embrujada. Nunca más he vuelto a escribir con tanta despreocupación ni con tanto placer ni con tanto aprovechamiento de las horas.» Eduardo Mendoza
Sinopsis:
Las enigmáticas desapariciones de niñas del colegio de las madres lazaristas de San Gervasio son el punto de inicio de la aventura indagatoria que tiene como protagonista a un cliente del manicomio, quien, obligado a convertirse en investigador, se verá envuelto en toda clase de percances de los que logrará salir llevando a cabo su cometido y descubriendo una intrincada farsa de gente pudiente. Aparentemente nivelada y lisa, la escritura de Mendoza constituye un espléndido ejemplo de investigación literaria personal, ajena a todo mimetismo, que ahonda en las posibilidades de volver del revés, sin infringirlas a primera vista, las posibilidades del relato tradicional, e indagar así, como un buen detective, o como un personaje de Henry James en el dibujo que se nos muestra al dorso del tapiz de la trama. Una farsa burlesca y una sátira moral y social que tiene sus raíces últimas en la picaresca y en el modelo cervantino.
Esta novela fue una lectura obligatoria en 3 ESO y debo decir que es una de las pocas novelas que me obligaron a leer que recuerdo con cariño, una de las pocas que realmente me gustó y me llevó a leer más allá de los capítulos que nos mandaban de deberes. Las sensaciones que me despertaba la novela tantos años después eran muy buenas, pero los recuerdos eran vanos, apenas algunas trazas del argumento asomaban en mi mente y se me planteó la eterna cuestión ¿releer o no releer? Tenía serias dudas acerca de volver a leer la novela ¿la disfrutaría como entonces o empañaría el buen recuerdo? Al final decidí por releer y creo que fue una decisión completamente acertada.
Con El misterio de la cripta embrujada nos encontramos ante una breve novela de misterio, que no por breve a dejar de tener en cuenta, ideal para alternar entre lecturas pesadas o para aquellos que siempre llevamos un libro encima pero seguimos resistiéndonos a los libros electrónicos.
Eduardo Mendoza nos sorprende con esta historia de misterios dando un giro a todo lo establecido para el género, en realidad nos presenta una sátira de las novelas de misterio, con situaciones absurdas y humor ácido que lleva al lector a alternar las sonrisas con la tensión por desvelar el misterio que esconde la cripta embrujada.
Es un libro ameno, que se lee fácilmente incluso diría que de una sentada, prácticamente como se escribió. Una novela original que entretiene y no decepciona. Sin duda, seguiré leyendo novelas de Eduardo Mendoza.
Enlaces de interés:
http://www.clubcultura.com/
http://www.planetadelibros.com
@Planetadelibros
Esta novela fue una lectura obligatoria en 3 ESO y debo decir que es una de las pocas novelas que me obligaron a leer que recuerdo con cariño, una de las pocas que realmente me gustó y me llevó a leer más allá de los capítulos que nos mandaban de deberes. Las sensaciones que me despertaba la novela tantos años después eran muy buenas, pero los recuerdos eran vanos, apenas algunas trazas del argumento asomaban en mi mente y se me planteó la eterna cuestión ¿releer o no releer? Tenía serias dudas acerca de volver a leer la novela ¿la disfrutaría como entonces o empañaría el buen recuerdo? Al final decidí por releer y creo que fue una decisión completamente acertada.
Con El misterio de la cripta embrujada nos encontramos ante una breve novela de misterio, que no por breve a dejar de tener en cuenta, ideal para alternar entre lecturas pesadas o para aquellos que siempre llevamos un libro encima pero seguimos resistiéndonos a los libros electrónicos.
Eduardo Mendoza nos sorprende con esta historia de misterios dando un giro a todo lo establecido para el género, en realidad nos presenta una sátira de las novelas de misterio, con situaciones absurdas y humor ácido que lleva al lector a alternar las sonrisas con la tensión por desvelar el misterio que esconde la cripta embrujada.
Es un libro ameno, que se lee fácilmente incluso diría que de una sentada, prácticamente como se escribió. Una novela original que entretiene y no decepciona. Sin duda, seguiré leyendo novelas de Eduardo Mendoza.
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Me pareció entretenida, ágil y fresca, pero poco más. El humor del autor me gustó menos de lo que esperaba, si bien es cierto que me encanta leer a escritores que tienen ese dominio del lenguaje.
ResponderEliminarUn petonet.